Via Crucis de HH y CC 2011: El Medinaceli

A pesar de las fuertes tormentas caídas durante toda la jornada, la meteorológia respetó, y el vía crucis oficial de las hermandades y cofradías gaditanas pudo celebrarse, aunque con la mirada al cielo. En marzo, en su mes por excelencia, la imagen de Nuestro Padre Jesús Cautivo y Rescatado, Medinaceli, ha sido la protagonista del rezo de las estaciones penitenciales -el propuesto por Juan Pablo II, en la Catedral de Cádiz acompañado por numerosos fieles que quisieron estar presenten en tan importante día para la Cuaresma gaditana.

A las 20.30 horas, puntual, la cofradía comenzó a disponer el cortejo en la parroquia de Santa Cruz, que abría la cruz de guía de la cofradía acompañada por dos servidoras que portaban un farol. mientras que la imagen esperaba en la parihuela cedida por la tertulia cofrade Al Palo, su momento para salir a la calle. Las andas estaban adornadas con lírios morados y con cuatro faroles de la cofradía de la Borriquita.

En tan solo diez minutos, el Medinaceli sobrepasaba el dintel de la puerta de la parroquia de Santa Cruz portado por sus hermanos, camino hacia la Seo. Tras recorrer la plaza Fray Félix, la imagen llegó hasta el Arco de la Rosa por la plaza de San Martín. Tras la imagen de Señor, numerosos devotos, más de medio centenar, seguían los pasos de la parihuela, además de los concejales del Ayuntamiento de Cádiz Juan Antonio Guerrero, Pablo Chaves, Clara Posada y José Macías, y una representación de la Marina y dela Guardia Civil.

En el Arco de la Rosa esperaban numerosos cofrades que querían recordar una imagen ya perdida en la Semana Santa gaditana, cuando la cofradía escogía este itinerario para llegar a la Catedral en la Madrugada del Viernes Santos antes de que María Santísima de la Trinidad fuese bajo palio.

A las 21 horas, puntual, y después de superar la escalinata de acceso al primer templo gaditano y entrar por la puerta de Poniente (la derecha al lado de la puerta principal), entraba el Señor para inicia el rezo del vía crucis en el interior de la Catedral. Una maniobra, así como todo el itinerario, dirigido por el capataz José Luis Pájaro.

En los pies del altar se comenzó a leer la primera estación, a cargo del joven cofrade Miguel Ángel Peñalver, al que siguieron Ana Acosta, Gema Freire, Manuel Llamas, Eloísa Campe, Miguel Morgado, Alfonso Caravaca, José Manuel Silva, José Romero, Ildefonso Herrera, Manuel Garrido, Martín José García e Ismael Pampará. Y por parte del clero, participarán Enrique Arroyo, Juan Carlos Pérez Godoy, Ignacio Sánchez Galán, Pedro Rodríguez, Rafael Fernández, Ramón Estíbaliz, Julián Fernández, Jesús García Cornejo, Salvador Gómez, Óscar González, César Sarmiento, Marcelino Martín y Balbino Reguera. La última estació fue leída por el obispo de Cádiz y Ceuta, Antonio Ceballos Atienza, que presidió el vía crucis. El prelado, antes de dar la bendición felicitó a los presentes por la amplia participación y por el silencio mantenido durante todo el rezo del vía crucis. Además, invitó a los creyentes a que esta Cuaresma les sirviese para ir creciendo en espíritu "y ser como el Cirineo, a estar la sombra de la Cruz para ayudar a los que están viviendo una dura situación económica y a los que se encuentran sin trabajo. Porque hay que solidarios en unos momentos tan difíciles, aunque Jesús siempre camina con nosotros, al igual que lo hace María, en silencio". Por último, se rezó por las intenciones del Papa y por la catástrofe de Japón.

A las 22.30 horas, la parihuela con la imagen del Medinaceli se despedía de la Catedral regresando a la parroquia de Santa Cruz por el mismo camino que lo había hecho de ida, por el Arco de la Rosa, la plaza de San Martín, la calle Obispo José María Rancés y la plaza de Fray Félix, para entrar, antes de que el reloj marcase las 23 horas, en su sede canónica.

FOTOGRAFíAS TOMADAS POR LA WEB PASIÓN Y GLORIA