sábado, 23 de abril de 2011

VIERNES SANTO

Malos pronósticos presagiaban la tarde noche de ayer. Expiración dicidió que no salía mientras que caía un intenso chaparrón sobre la ciudad.

Tendriamos que esperar para que Siete Palabras, para sorpresa de tod@s los gaditanos y cofrades en general, decidiera realizar su estación de penitencia y completar el recorrido oficial, puesto que los partes que manejaban no daban agua sobre el periodo de tiempo que ellos estaban en la calle.

A su vez Servitas decidió no realizar su estación de penitencia por la lluvia, pero consolandonos el director espiritual ya que en Septiembre la podremos ver en la calle, por motivo de su coronación.

Pues a las 7h45 se abrian las puertas de la Merced, abarrotada de público para ver la salida de la única hermandad que pasaría por Carrera Oficial después del Caminito. A los pocos minutos y puesto que esta hermandad no tiene un gran número de hermanos con hábito franquearía el paso de misterio la puerta de esta iglesia y a los sones de la Marcha Real, interpretada por la BCT Santísimo Cristo del Perdón de San Fernando saldría el Cristo de la Sed, recostado para poder salvar la pequeña puerta de la iglesia mercedaria.

Una vez que la maniobra fue realizada y se pusieron los zancos para que el paso estuviera a la altura normal para procesionar inició su itinerario por las calles del barrio de Santa María para llegar a la Catedral y completar su itinerario sin ninguna gota de agua.

Cuando esta hermandad se encontraba en Catedral, conocimos la esperada noticia de la suspensión de la salida procesional del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Mª Stma. del Mayor Dolor.

La congregación mariana desafió, como siempre hace, a todas las inclemencias meteorológicas y la 1 de la madrugada salió desde la iglesia de Santiago. El cortejo de la congregación mariana Ecce Mater Tua incorporaba las matracas, un elemento con el que la procesión avanzaba, o se detenía, según el momento. Estos instrumentos musicales los usaba antes la Iglesia en sustitución de las campanas desde el Jueves Santo hasta la víspera de Resurrección, en la medianoche de ese domingo, cuando se pone final a la Semana Santa.

La congregación ha querido recuperar este elemento litúrgico que apenas se usa actualmente. que está en desuso, a excepción de la zona de Castilla. Así, en el cortejo de Ecce Mater Tua se dispusieron dos matracas, una delante de la cruz de guía, y la otra junto al paso de la Virgen

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